El clavadista vallecaucano Orlando Duque inició el 2018 con un sueño cumplido, saltar desde la Antártida en medio de icebergs y a temperaturas bajo 0, en proyecto con la Armada Colombiana.  Con 43 años de edad, el ‘Duque de las Alturas’ emprendió un viaje de varias estaciones, llegando primero a Punta Arenas, la ciudad más austral en la Patagonia chilena, para ir por el estrecho de Magallanes hasta alcanzar la Península Antártica, en donde comenzaría la búsqueda del lugar perfecto para saltar, desplazándose en una embarcación de fabricación colombiana, Buque ARC 20 de Julio, adaptado para investigación oceanográfica.

Según Orlando, la mayor dificultad del viaje fue encontrar los lugares de los saltos porque el acceso a un iceberg es complejo. “Son muy inestables, son impredecibles y se pueden voltear en cualquier momento, por eso hay que buscarlos de cierto tamaño, y en algunos casos se puede correr el riesgo de que se desprenda un pedazo de hielo o se dé vuelta”. El proyecto tuvo una temperatura máxima de 1°c y la sensación térmica más baja fue de -25°c.

Sin embargo, una de las grandes ventajas del viaje fue la luz día, que estaba presente por 23 horas, lo que le permitió realizar tres saltos oficiales en dos lugares diferentes, uno de 12 metros y otro de 20 metros de altura, con un traje de buceo neopreno de siete milímetros, una capucha de seis milímetros de grueso, que sólo deja descubierta la cara, guantes y botas, por las bajas temperaturas del agua y la sensación ambiente.

Así fue como el vallecaucano, junto con dos buzos de reserva, dos supervisores chilenos especialistas en buceo polar, un médico y un enfermero de la Armada, cumplió uno de los sueños que le hacía falta en su exitosa carrera deportiva, saltar en la Antártida y completar un ciclo de seis continentes conquistados.