Foto: fao.org
El 20 de mayo es el Día Mundial de las Abejas, quienes desde los primeros siglos han sido las responsables de beneficiar a las personas, plantas y el planeta entero, así lo ha destacado la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura ( FAO).
Esta celebración coincide con el nacimiento de Anton Jansa,pionero de la apicultura moderna en Eslovenia en el siglo VXIII. La polinización es fundamental para la supervivencia de los ecosistemas, la producción y reproducción de muchos cultivos y plantas silvestres.
Entidades internacionales se han puesto en la tarea de alertar las consecuencias de la disminución de las poblaciones de abejas. Recomiendan iniciativas de fomentación y protección de la apicultura.
La necesidad de cuidar y proteger el hábitat de las abejas, también es para garantizar la supervivencia del hombre, debido a que ellas aumentan la producción de alimentos y ayudan a que sean ricos en micronutrientes, asimismo, mantener la biodiversidad.
En Norte de Santander, la gran mayoría de los apicultores trabajan de forma individual, se estiman que hay alrededor de 300 a 400 apicultores. Lamentablemente en estos dos últimos años las instituciones gubernamentales no han impulsado esta actividad; según la Secretaría de Desarrollo Económico Departamental, el último proyecto en el sector referente al cuidado y preservación de las abejas fue entre 2016 y 2017.